Paseo por los blogs // Caminata sensorial

A continuación, recopilación de algunas experiencias de estudiantes publicadas en sus blogs luego de la caminata sensorial llevada a cabo en FADU por la Arquitecta Carolina Huffmann:

    Cuando abrí los ojos era una chica con la que nunca nunca había hablado antes y sentí un poco toda la vergüenza que segundo antes no / Quede reflexionando mucho sobre como el hecho de las apariencias nos limitan a comportando como en realidad deberíamos y nos limitamos a hablar con ciertas personas solo por prejuicio / solo queda confiar y seguir avanzando / un lugar y un recorrido que transito casi todos los días paso a ser tan desconocido / Esa confianza luego se transformo en preocupación / Al llegar al aula, sentí cierta comodidad de estar en un lugar contenido / nos divertimos, nos angustiamos, nos perdimos y creo que sobre todo reflexionamos / Esa fue mi sensación mas fuerte, como los colores que forman MI universo se fueron y quedo todo negro, sin formas, texturas, sentido / Conozco los pisos, los recovecos, los cientos de escalones por los que tengo que pasar para llegar a mi salón de clase. Conozco dimensiones, colores, luces, sombras. Conozco caras, texturas visuales. Conozco ruidos, voces, risas. Pero no conozco vivir en una oscuridad completamente silenciosa / Son tan distintos los olores, dicen tanto de una persona, me acuerdo que siempre que iba a la cama de mis viejos cuando era chica me encantaba el olor de la cama de mama /Calma porque en ese estado de exposición, indefenso, vulnerable, le tormenta diaria de la cabeza calla, y la prioridad numero uno pasa a ser el AHORA /El miedo de no poder reconocer si un espacio esta iluminado o no, que no exista el sonido, el no saber a que me enfrento. Los usuarios que nacen con esto, no pueden temerle a algo que no conocen. Entonces segui caminando /
mi buzo de lana, transmitía calor con solo olerlo, ”huele a calorcito” / al momento de sacarme las vendas tuve la sensación de haber estado en un sueño / Caminar por un lugar que uno piensa que lo sabe de memoria pero no, justamente esta ultima, la memoria, se encontraba trabajando intensamente, intentando deducir, descifrar, en que sector del edificio que pensabas que conoces perfectamente, te encontrabas / El estar ciego me dio ojos en otras partes del cuerpo / Es otra forma de ver. Tus ojos mas importantes ahora son las manos /Le di mucha atención a las texturas que sentía con los pies (que me sorprendió poder sentirlas a pesar de tener las zapatillas / si me siento asi de desorientado caminando 5 pasos no me imagino lo que se viene / En el momento en que decidimos formar parte de una masa de no videntes, el cerebro se olvidó de todo / si bien podía escuchar, y oler, hasta no entrar en calma, lo único que podía sentir era mis pies una vez se apago todo me sentí en un abismo, que lo único que me sostenía era círculo en mis pies del diámetro Justo para que no me cayera / Tenía la sensación de que toda la facultad se burlaba de mí. Obviamente entendí que si yo estuviera del otro lado me sorprendendería, y diría “¿Qué hacen estos locos?”. Pero en ese momento se me cruzó, que pensarán los sordociegos cuando caminan por la calle? ¿Sentirán vergüenza como yo la sentí? / ¿Qué hora es? ¿Hace cuánto estamos en ésta? ¿Cuánto falta? no quería que termine, capaz solo quería tener el control de algo y mi reloj no era más que una pulsera /Caminar a ciegas no me pareció lo más terrible, obviamente porque fue por un corto tiempo previamente establecido y sabía que había gente que estaba cuidándonos para llevar a cabo la experiencia de forma segura /Ya hablar de una vida en penumbras y sin sonidos es meterse en un asunto más angustiante, una situación realmente difícil de manejar / cada escalón era una cornisa del piso más alto de un edificio de 1000 pisos / Todo era incierto / Al final de la experiencia, de abrir los ojos, quería volver a reencontrarme conmigo, con mis cosas, buscar a la gente de siempre /vivimos mucho de las percepciones del exterior, miramos y escuchamos al resto de una forma superficial, pero al quitar los sentidos externos, como el oído y la vista, podemos escuchar nuestro cuerpo, sentir esos nervios, ese hablar del cuerpo propio que no siempre escuchamos y deberías primero de todo escuchar / yyyyyy....
gracias a la catedra y sus docentes que, aunque tienen sus cosas como todos, creo que nos llevan por un camino a ciegas por el que nos sentimos inseguros, con miedos. Pero al final, nos destapan los ojos y nos muestran la otra cara de la realidad.

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